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15,20 €En tiempos de polÃtica virtual, ni los algoritmos más sofisticados pueden sustituir la vigencia de la polÃtica como arte, tragedia o fiasco. En la vida polÃtica hay intereses espurios o no, pasión, cálculo, simulación. AsÃ, puede tener la nobleza del ser humano aspirando al bien común o la condición rectilÃnea de poder por el poder, a costa de todo. Habitualmente, es ambas cosas a la vez y por eso es casi obligado practicarla u observarla con malicia. El escepticismo puede ser un antÃdoto contra la hipocresÃa polÃtica, como queda reflejado en las citas de Malicia en el paÃs de la polÃtica, seleccionadas y presentadas por Valentà Puig. De Cicerón a Walter Lippmann, de Diego de Saavedra Fajardo a Manuel Azaña o de Benjamin Franklin a Charles de Gaulle, protagonistas y espectadores de la historia polÃtica han formulado los principios de la malicia polÃtica con una lucidez que sigue siendo tan actual como útil. Las breves lecciones compiladas en este libro también sirven de advertencia, aunque casi nunca se tengan en cuenta. Tal vez Alicia lo predijo ya en su paÃs de las maravillas cuando dijo: «De nada sirve regresar al ayer, porque entonces era una persona diferente».