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52,26 €La fe cristiana tiene como singularidad, origen e historia creer en un Dios que ha hablado a los hombres desde siempre y que ha venido a habitar entre ellos hace ahora dos mil años, encarnado en Jesús de Nazaret, muerto en una cruz y vuelto a llamar por Dios a la vida para conducir a la humanidad a su destino eterno. Sin embargo, esta revelación, recibida de la debilidad y de la locura de la cruz, dice san Pablo, es difÃcil de creer, y cae de tan alto y viene de tan lejos que parece en vÃas de desaparecer de la cultura occidental, a la que ha inspirado y regentado durante tanto tiempo. Este libro revisa la tradición que ha difundido esta fe y experimenta si esta todavÃa es capaz de hacer creer que Dios viene a los hombres desde el futuro de nuestro destino.
La tradición cristiana proclama que Jesús es el Hijo eterno de Dios, nacido hombre de la Virgen MarÃa para regenerar la humanidad en el EspÃritu de Dios y conducirla por la Iglesia a la vida eterna. Ahora bien, la ciencia moderna de los textos bÃblicos y evangélicos ha cavado un foso entre lo que se puede conocer con certeza sobre la historia de Jesús y la interpretación que ha hecho de ella el dogma de la Iglesia, dogma que la evolución de los espÃritus hace poco creÃble a nuestros contemporáneos. De ahà que los teólogos, que pretenden respetar la verdad histórica de los textos y hacerlos inteligibles a nuestro tiempo, se sientan obligados a repensar esta tradición en su totalidad a la luz de una fe crÃtica. Eso es lo que ambiciona este libro: emprender un proceso de veracidad y de libertad en la búsqueda del sentido de la fe.
Con este objeto el autor emprende la tarea de descifrar el misterio que tiende a expresarse bajo el mito de la preexistencia de Cristo, idea que se encuentra en la base de los conceptos de trinidad, encarnación y redención en el dogma: de hecho, se trata de la revelación de la humanidad de Dios, comprendida como el amor por el que Dios entra en comunicación con los hombres para liberarles de su finitud, del repliegue egoÃsta y mortÃfero de cada uno sobre sà mismo, algo que les impide llegar a la unidad entre ellos y con el universo.
Joseph Moingt nació en Salbris (Francia) en 1915. Enseñó teologÃa en el escolasticado jesuita de Lyon, posteriormente en el Instituto Católico de ParÃs y en el Centro Sèvres de la CompañÃa de Jesús. Ha dirigido la revista Recherches de science religieuse.