El narcisismo y exhibicionismo exacerbados por la "sociedad virtual" del siglo XXI amenazan con la desaparición del Eros. ¿Están en peligro de extinción el misterio, la fantasÃa, el amor, el erotismo, incluso la protesta polÃtica?
La proclamación neoliberal de la libertad se manifiesta en realidad como un imperativo paradójico: sé libre. Domina una economÃa de la supervivencia en la que cada uno es su propio empresario. El neoliberalismo, con sus desinhibidos impulsos narcisistas del yo y del rendimiento, es el infierno de lo igual, una sociedad de la depresión y el cansancio compuesta por sujetos aislados.
Los muros y las fronteras ya no excitan la fantasÃa, pues no engendran al otro. Dado que el Eros se dirige a ese otro, el capitalismo elimina la alteridad para someterlo todo al consumo, a la exposición como mercancÃa, por lo que intensifica lo pornográfico, pues no conoce ningún otro uso de la sexualidad. Desaparece asà la experiencia erótica. La crisis actual del arte, y también de la literatura, puede atribuirse a esta desaparición del otro, a la agonÃa del Eros.
Con toda seguridad no habrá una polÃtica del amor. Sin embargo, las acciones polÃticas comunican con el Eros, pues suponen el deseo común de otra forma de vida. El amor interrumpe la perspectiva del uno y hace surgir el mundo desde el punto de vista del otro, de la diferencia. AsÃ, el Eros constituye una fuente de energÃa para la protesta polÃtica. Se manifiesta como aspiración revolucionaria a una sociedad completamente diferente. Es más, mantiene en pie la fidelidad a lo venidero.
Byung-Chul Han, de origen coreano, estudió FilosofÃa en la Universidad de Friburgo y Literatura alemana y TeologÃa en la Universidad de Múnich. En 1994 se doctoró por la primera de dichas universidades con una tesis sobre Martin Heidegger. En la actualidad es profesor de FilosofÃa y Estudios culturales en la Universidad de las Artes de BerlÃn. Es autor de más de una decena de tÃtulos, de los cuales se han traducido al castellano, además de la presente obra, La sociedad del cansancio y La sociedad de la transparencia.